La desigualdad de salario es un tema que existe y afecta en todo el mundo. De acuerdo a un artículo publicado por la ONU, a nivel mundial existe una brecha salarial de género del 20%. Pero esta, es sólo una de las barreras a las que se enfrentan las mujeres, ya que tampoco existen las mismas oportunidades para ascender u obtener mayores responsabilidades.
A pesar de todos los avances que hemos tenido en términos de modernización y tecnología, así como los aprendizajes y resiliencia que hemos adquirido tras tiempos de incertidumbre, aún prevalecen los estereotipos de género, donde no tenemos las mismas oportunidades ni se paga de manera equitativa, a pesar de tener la misma experiencia y capacidades.
Seguimos viendo puestos con una mayor concentración de mujeres y hombres en determinados sectores y ocupaciones - fenómeno conocido como segregación ocupacional - el cual reduce los ingresos promedio de las mujeres en comparación con los hombres.
La presidenta del Inmujeres, Nadine Gasman Zylberman dijo que “la lucha por la igualdad salarial cobra una nueva urgencia porque quienes ganan menos son quienes más daños sufren por la discrepancia en los ingresos"; como ejemplo citó que ONU Mujeres identificó qué en Estados Unidos, las mujeres afroamericanas ganan sólo 62 centavos, las indígenas 57 centavos y las latinas 54 centavos por cada dólar que ganan los hombres blancos. Esto agrega otro nivel de preocupación, ya que esta discriminación por grupo racial se suma a la ecuación de la desigualdad laboral.
También compartió algunas de las principales causas de esta brecha:
- La discriminación en el lugar de trabajo
- La diferencia en sectores en los que históricamente se han desempeñado los hombres
- La escasa participación de mujeres en puestos de liderazgo y alta dirección
- La falta de políticas de conciliación de la vida personal y profesional
En el caso de México, según el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), existe una brecha salarial del 14%. Esto quiere decir que por cada 100 pesos que gana un hombre, la mujer gana únicamente 86, lo que significa que la mujer tendría que trabajar 38 días adicionales para ganar lo mismo que un hombre.
Adicionalmente, el porcentaje de mujeres en puestos directivos se sitúa en 33%, de acuerdo con el informe “Women In Business 2022” publicado por la firma Grant Thornton en el marco del Día Internacional de la Mujer. Mostrando la gran diferencia de oportunidades que existen actualmente.
De acuerdo a un estudio realizado por Harvard Business Review y UKG, una igualdad salarial también trae beneficios para la organización, incluyendo: mejora de retención del talento un 71%, crea una cultura empresarial 60% más fuerte, genera un 60% mayor de compromiso y productividad de los empleados, entre otros.
Debemos seguir luchando por disminuir esta brecha salarial y de oportunidades que existe entre hombres y mujeres. Igual de importante que los líderes sigan tomando acciones dentro de sus organizaciones, como seguir impulsando mejores prácticas de diversidad, inclusión y equidad, así como incrementar la participación de las mujeres en puestos directivos para lograr que todos tengamos las mismas oportunidades y se nos valore por nuestras capacidades y talento.